Las transferencias económicas del Programa AVANCEMOS del Instituto Mixto de Ayuda Social y su aporte en el componente educativo y psicosocial (período 2006-2010), los casos de: Liceo de Aserrí, Liceo Experimental Bilingüe de Pococí y Colegio Técnico Profesional de Guápiles.

Abstract

El foco de interés para esta investigación se centró en la contribución del componente educativo que se deriva de las transferencias dadas por el Programa Avancemos, desde la perspectiva de distintos actores (estudiante de secundaria, familia beneficiaria, profesores y profesoras de secundaria, directores y directoras de centros educativos, entre otros) en el período 2006-2010. Las personas que participaron en la investigación fueron: las y los estudiantes beneficiados que tuvieran al menos dos años de recibir la transferencia, las autoridades educativas de los colegios seleccionados quienes otorgaron el aval para realizar el trabajo de campo, el personal docente, las orientadoras y las familias de las y los beneficiarios seleccionados. Se trabajó en conjunto con el personal del Programa Avancemos para determinar ciertos criterios para la escogencia de los centros educativos en que se desarrolló la investigación. Los colegios seleccionados fueron: Colegio Técnico Profesional de Pococí, Liceo Experimental Bilingüe de Pococí, ambos en Guápiles (Limón) y el Liceo de Aserrí en San José. Para recolectar la información se utilizaron las siguientes técnicas: talleres participativos (lluvias de ideas y elaboración de un collage), grupos focales, entrevista grupal, entrevista semi-estructurada a madres de familia y cuestionario para profesores y profesoras y reuniones abiertas en cada centro educativo para validar la información. Se consultó también información documental en cada centro educativo, y se recolectó información mediante correo electrónico, teléfono y conversaciones informales con las orientadoras.

En el proceso de investigación acerca de los aportes de esta transferencia económica, la mayoría de los actores consultados lo consideran como una beca para estudiar. Se concluye por lo tanto, que es necesario hacer esta aclaración conceptual sobre las becas y las transferencias económicas condicionadas, en el tanto estas últimas son la manera en que se expresa la política social. Con este beneficio económico se espera que el estudiante permanezca en el sistema escolar y subsnecesidades que requiere este largo proceso para contribuir a que el estudiante y su familia encuentren un mejoramiento en la calidad de vida y superar su condición de pobreza. Es importante enfatizar que la población meta de estas transferencias ya se encuentra clasificada de acuerdo con los parámetros implementados por el IMAS, un ejemplo de ello, es la Ficha de Información Social (FIS). Esta aclaración conceptual conlleva a decir que la condicionalidad no radica en las exigencias académicas propiamente dichas, sino más bien, a la condición de pobreza, vulnerabilidad y riesgo de las familias. Paralelo a los aportes de Avancemos se encuentran otro tipo de incentivos académicos, como por ejemplo, becas para que puedan desplazarse de sus hogares a los colegios; exoneración de pago de fotocopias, transporte público, servicio de comedor, becas por excelencia académica, entre otros, los cuales en muchos casos se gestiona desde cada centro educativo en colaboración con el cuerpo docente, el Patronato Escolar y Comités de Bienestar.

ABSTRACT: The research interests focus on the contribution of educational components that derive from the transfers from the Avancemos (move forward) Program from the perspective of different participants (high school students, beneficiary families, school principals, among others) during the period of 2006-2010. The participants in the research were: benefited students who had at least two years of receiving the transfer, school authorities from selected high schools who authorized the field work, teaching staff, guidance counselors, the families of the selected beneficiaries. Joint work was carried out with the staff from the Avancemos Program to determine certain criteria to choose the educational centers in which to conduct the research. The selected high schools were: Colegio Técnico Profesional de Pococí, Liceo Experimental Bilingüe de Pococí, both in Guápiles (Limón) and Liceo de Aserrí in San José. In order to collect the information, the following techniques were used: participatory workshops (brainstorming and creating collages), focus groups, group interviews, semi-structured interviews to mothers, questionnaires for teachers, and open meetings in each educational center to validate the information. The information was consulted with each educational center, and it was collected by email, telephone and informal conversations with counselors.

Through the process of the research about the contributions of this economic transfer, the majority of participants consulted thought of it as a scholarship to study. To conclude, therefore, that it is necessary to clarify the concept of scholarship and conditioned economic transfers as long as both are a way in which social policy is manifested. With this economic benefit, it is expected for the student to remain in the school system and for the benefit to meet their needs required in this long process so as to help the student and his/her family identify an improvement in the quality of life and overcome, in this way, their condition of poverty. It is important to emphasize that the target population receiving these transfers is already classified according to the parameters implemented by the IMAS. An example of it is the Social Information Facts Sheet (FIS for its acronym in Spanish). The clarification of this concept leads to stating that the conditional factor does no lie on the academic requirements as such, but rather on the condition of poverty, the families' vulnerability and risk. Parallel to the contributions of Avancemos are other types of academic incentives, for example, scholarships for them to travel from home to school, photocopy fee waiver, public transportation, dining hall service, scholarships for academic excellence, among others. These incentives in many cases are managed by each educational center in collaboration with the teaching staff, School Board and Welfare Committees.